Almagro conquista un empate vital en su lucha por la permanencia en la liga

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La jornada 9 de la Segunda División de fútbol sala femenino se caracterizó por un emocionante choque entre Almagro FSF y Arriva AD Alcorcón en el Pabellón Gemma Arenas, donde la pasión y el fervor de los aficionados lograron crear un ambiente vibrante para ambas escuadras. Desde el comienzo, Alcorcón se presentó en la cancha con una intensidad notable, implementando una presión alta que complicó el desarrollo del juego para el equipo local. Esta presión culminó desafortunadamente en un autogol de Raquel, quien, en un intento por despejar el balón, lo dirigió a su propia portería, poniendo al Almagro en desventaja temprana.

Pese al complicado inicio, Almagro no se rindió y mantuvo su búsqueda del empate. La perseverancia del equipo dio sus frutos antes del descanso, cuando Indira se encontró con un rebote tras una excelente jugada de Rebeca y logró marcar, restableciendo así la igualdad en el marcador. La segunda mitad del encuentro trajo consigo una notable mejora en el juego de Almagro. Alba Peña anotó rápidamente, otorgando a su equipo una ventaja momentánea que sembraba esperanza en los aficionados.

Sin embargo, la emoción del partido continuó en aumento cuando un error defensivo permitió a Alcorcón empatar casi de inmediato. Este desenlace llevó a Almagro a intensificar su juego, generando diversas ocasiones que parecieron acercarles al triunfo. Tanto así que optaron por jugar con portera-jugadora en un esfuerzo por desdibujar la defensa rival y conseguir el gol que les diera la victoria.

Con el tiempo corriendo y el reloj acercándose al pitido final, Almagro buscó la victoria desesperadamente. Aunque tuvieron oportunidades claras, incluyendo un tiro que se estrelló en el poste y una ocasión fallida por parte de Ventoso, el marcador se quedó en 2-2. La conclusión del partido estuvo marcada por un clima de tensión y polémica; los aficionados expresaron su descontento debido a la no sanción de la sexta falta a favor de Almagro en los instantes finales, lo que generó un ambiente de controversia en el recinto. Parecía evidente para muchos que las rojillas habían dejado todo en la cancha y merecían más de lo que el marcador reflejaba al final del partido.