El PSOE de la provincia de Toledo ha reafirmado su «fuerza y unidad» frente a los retos futuros durante la tradicional comida de Navidad del partido, celebrada en la capital regional y a la que asistieron más de 600 personas. Este evento se convirtió en un espacio para manifestar el «orgullo» por el trabajo realizado en los municipios toledanos, tanto en los gobiernos locales como desde los grupos de oposición.
El secretario general del PSOE en Toledo, Álvaro Gutiérrez, junto a destacadas figuras del partido como Sergio Gutiérrez, secretario de Organización del PSOE en Castilla-La Mancha, y la consejera Portavoz, Esther Padilla, ofrecieron discursos que reflejaron la cohesión interna del partido. Gutiérrez enfatizó la importancia de la unidad en una organización que cuenta con 145 años de historia y mostró su satisfacción por los logros alcanzados, mirándose con optimismo hacia el futuro.
Durante su intervención, Gutiérrez destacó que el PSOE se mantiene como «el partido faro» en la región, simbolizando estabilidad y credibilidad. Recordó los resultados de las pasadas elecciones municipales, donde el PSOE ganó con una ventaja de más de 5.000 votos sobre el Partido Popular y abordó la situación actual con la coalición de la derecha y ultraderecha que gobierna en algunas localidades y en la Diputación.
El líder socialista envió un mensaje de ánimo, subrayando que solo quedan «dos años para consolidar los actuales gobiernos municipales» y recuperar aquellos que, según él, la ciudadanía ha echado de menos. Reiteró que en los municipios dirigidos por formaciones de derecha, «viven de las rentas» de la gestión socialista, reafirmando el compromiso del PSOE de volver a recuperar esos gobiernos, guiándose siempre por los principios de igualdad, justicia social y solidaridad.
Gutiérrez cerró su discurso con una contundente afirmación: «el futuro se llama PSOE, el progreso se llama PSOE», marcando un claro rumbo hacia los desafíos que el partido enfrentará en el futuro.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
