En Ciudad Real, una muestra destaca la creatividad de una docena de jóvenes arquitectos, quienes presentan obras que combinan alta calidad técnica con una fuerte sensibilidad social. La exposición, que se lleva a cabo en el ‘Espacio Fisac’ del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha, es gratuita y estará abierta al público hasta el 10 de junio.
José Antonio González Baos, presidente de la Demarcación de Ciudad Real del COACM, ha elogiado esta iniciativa al señalar que los proyectos en exhibición auguran un futuro prometedor para la arquitectura en la región.
Entre los participantes, Cristina Grande presenta su proyecto “Materializar la frontera”, que consiste en un conservatorio de danza ubicado en la histórica Fábrica de Armas de Sevilla, donde busca fusionar lo nuevo con el patrimonio. Por otro lado, Borja Prado muestra tres propuestas desde la Escuela de Arquitectura de Toledo, incluyendo “Preludio”, una vivienda mínima en Capri que busca captar la esencia del habitar, y “Ascenso Sesgado”, una atalaya en Zorita de los Canes.
David Rubia, de la ETSAS, exhibe “Colonizar la Corta”, que propone una residencia para creadores digitales en una antigua mina de carbón, explorando la conexión entre topografía y urbanismo. Elena Lorente, de la ETSAM, contribuye con un Centro para la música y la danza en Berlín, que combina docencia y espacios públicos. Jesús Casas, de la ETSAC, presenta las “Viviendas transitorias para pacientes oncológicos”, inspiradas en los Maggie’s Centres, con el objetivo de ofrecer apoyo emocional a través de la arquitectura.
La decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha reafirma el compromiso con el talento joven, asegurando que “los jóvenes arquitectos son, sin duda, el futuro de nuestra profesión”. Estas iniciativas no solo celebran la innovación, sino que también actúan como un trampolín para las nuevas generaciones de arquitectos, quienes están comprometidos con un enfoque sensible y sostenible.