El Atlético de Madrid se encuentra en una encrucijada tras la dura derrota sufrida en Anfield, con la mirada puesta en lograr un segundo triunfo consecutivo en LaLiga frente al Mallorca. Diego Simeone ha centrado su atención en la recuperación de Julián Álvarez, quien trabaja a contrarreloj para estar disponible. El delantero argentino, que se perdió su primer partido en la Champions League a causa de una lesión, se ha convertido en una figura esencial en el ataque rojiblanco, aportando la explosividad que se echó de menos en el último enfrentamiento.
A medida que Álvarez empieza a sentirse mejor, surge la incertidumbre sobre si se arriesgará a incluirlo en la convocatoria para el viaje a Palma. La decisión final de Simeone dependerá de la última sesión de entrenamientos, donde valorará si es prudente contar con el delantero o esperar a que esté completamente recuperado. La necesidad de sumar puntos es urgente, especialmente tras el pobre desempeño ofensivo que mostró el equipo sin él en el partido anterior.
Además, Simeone planea reforzar su defensa con la inclusión de Hancko, quien podría ser clave para evitar errores similares a los que llevaron a la caída frente al Liverpool. Si finalmente Álvarez no forma parte del once inicial, Simeone tiene en mente utilizar a Sørloth o Griezmann como alternativas en el ataque, aunque ambos han tenido un rendimiento irregular en las últimas semanas. En las bandas, se espera que Simeone y Nico González tomen protagonismo, con el último mostrando un rendimiento que justifica su lugar en el equipo titular. Con estos ajustes, el Atlético de Madrid se alista para un enfrentamiento crucial, buscando recuperar su solidez defensiva y su capacidad ofensiva.