El Gobierno de Castilla-La Mancha está en proceso de desarrollo de un nuevo Plan Integral contra el Cáncer, el cual se basa en principios de atención integral, equidad, calidad, sostenibilidad y humanización. Este plan pretende fortalecer la cadena de atención oncológica en la comunidad autónoma, como ha señalado Alberto Jara, director gerente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), durante la inauguración de la XIII Reunión Nacional de Avances en el Tratamiento del Cáncer de Próstata, Vejiga y Riñón.
La elaboración del nuevo plan se está llevando a cabo mediante un proceso participativo que involucra a profesionales del sector, sociedades científicas y asociaciones de pacientes. Jara informó que ya se han completado las dos primeras fases de análisis y diagnóstico con la colaboración de más de una veintena de expertos de diversas áreas, como formación, investigación, salud pública y bienestar social.
Hoy da inicio la tercera fase del proyecto, que reúne a cerca de 40 profesionales encargados de definir los planes de acción que guiarán el desarrollo del plan en los próximos meses. Se crearán grupos de trabajo sobre temáticas específicas, y durante junio se enviará una propuesta preliminar de líneas estratégicas para su revisión. En septiembre está prevista una puesta en común de las aportaciones y la realización de talleres temáticos que permitirán elaborar el primer borrador del Plan Integral Contra el Cáncer.
Jara subrayó el compromiso de Castilla-La Mancha en la lucha contra el cáncer, ofreciendo un modelo asistencial centrado en la persona y adaptado a las características de la región. El plan se orientará hacia cinco objetivos estratégicos: reducir la incidencia del cáncer, garantizar atención oncológica integral y de calidad, optimizar la organización sanitaria, estandarizar datos de salud, y fomentar la investigación en oncología.
Además de la creación de este plan, el Gobierno regional ha implementado una renovación tecnológica sin precedentes en el tratamiento de patologías oncológicas, modernizando la capacidad asistencial en los hospitales de la región. En el Hospital de Guadalajara, estas inversiones han sido clave para el desarrollo de la Oncología Radioterápica y Medicina Nuclear, lo que mejorará significativamente la atención de los pacientes oncológicos.
La incorporación de un equipo PET-TC en el hospital facilitará diagnósticos cruciales para los estudios iniciales y la monitorización de recaídas. La colaboración entre oncólogos médicos y radioterapeutas transformará la atención diaria, ofreciendo un enfoque más completo y efectivo en la lucha contra el cáncer de próstata, vejiga y riñón.
vía: Diario de Castilla-La Mancha