DeepSeek, un modelo de inteligencia artificial originario de China, ha sufrido fallos técnicos en una demostración en vivo, coincidiendo con su lanzamiento como competidor directo de ChatGPT, el popular chatbot de OpenAI. Este incidente se produce en un contexto de gran expectación, ya que DeepSeek intenta posicionarse como una alternativa viables frente a los productos de grandes empresas tecnológicas estadounidenses. Sin embargo, las dificultades técnicas han resaltado los retos que enfrenta la startup china en su ambición de desafiar a los gigantes de la industria.
La controversia se intensifica ya que OpenAI ha señalado que existen evidencias que sugieren que DeepSeek podría haber utilizado su propio modelo para entrenar a su chatbot competidor, lo que ha encendido un debate sobre la ética en la recopilación de datos. El modelo R1 de DeepSeek, que promete ser una opción económica para los consumidores, ha tenido repercusiones en los mercados, provocando caídas en las acciones de las compañías de Silicon Valley y generando incertidumbre entre los inversores sobre los planes de gasto de estas grandes corporaciones dedicadas a la inteligencia artificial.
De acuerdo con informes de Bloomberg, OpenAI, junto a su principal inversor, Microsoft, está llevando a cabo una investigación para determinar si DeepSeek ha recopilado datos de forma no autorizada. Se ha detectado que algunos usuarios han estado exportando grandes volúmenes de información desde los productos de OpenAI, lo que añade más peso a las acusaciones. Adicionalmente, OpenAI ha informado haber encontrado indicios de un proceso de «destilación», una técnica que permite transferir el conocimiento de un modelo de mayor tamaño a uno de menor capacidad. Esto podría haber mejorado el rendimiento de DeepSeek y alimentado los rumores sobre el uso indebido de esta tecnología.
Los efectos de esta controversia no han sido reservados a la esfera tecnológica; los mercados financieros también han sentido su impacto. A pesar de la situación, el miércoles los mercados globales mostraron signos de estabilidad. El índice Topix de Japón ganó un 0.7% y el ASX de Australia experimentó un ascenso del 2.9%. En Londres, el FTSE 100 abrió prácticamente sin cambios.
La atención ahora se centra en Wall Street, donde se espera que la apertura del mercado estadounidense ofrezca una perspectiva más clara sobre cómo la rivalidad entre DeepSeek y OpenAI, así como los posibles efectos sobre el sector de inteligencia artificial, afectará el comportamiento de las acciones de las compañías implicadas. La situación sigue en desarrollo, y los inversores estarán atentos a cualquier actualización que pueda influir en la dinámica del mercado.
