Guadalajara, 27 de enero de 2025.- Los Bibliobuses de Guadalajara se han consolidado como un pilar fundamental en la promoción de la lectura y la cultura en la provincia, atendiendo el pasado año a un total de 5.462 personas. Estos vehículos móviles han prestado 11.266 documentos bibliográficos, ofreciendo una solución a los residentes de municipios sin biblioteca pública y reafirmando el compromiso del Gobierno regional por facilitar el acceso al conocimiento.
El servicio no solo se limita al préstamo de libros, sino que también apoya a 28 aulas de distintos Colegios Rurales Agrupados y a dos residencias de mayores en Molina de Aragón. Esta iniciativa se desarrolla gracias a un convenio anual entre el Gobierno regional, la Diputación provincial y la Fundación Impulsa, que colaboran en el mantenimiento y expansión del servicio de bibliotecas móviles.
Los bibliobuses recorren 154 núcleos de población a través de 50 rutas, incluyendo la nueva ruta de Hita, que se activó en 2024 con la apertura de un aula para Educación Primaria. Esta acción refleja una adaptación constante a las necesidades de las comunidades rurales.
Además del préstamo tradicional, el servicio también ofrece un sistema de envío de documentos bibliográficos por correo postal, facilitando aún más el acceso a la lectura. Los bibliobuses impulsan diversas actividades culturales que fomentan el intercambio de conocimientos y la preservación de la historia y tradiciones locales. En el último año, se llevaron a cabo 20 actividades en distintos pueblos, abarcando desde talleres hasta recitales de narración oral.
Uno de los hitos del año pasado fue la presentación del libro «Guadalajara. Rescatados del Olvido», fruto de entrevistas realizadas por el personal de los bibliobuses en diversas localidades, con el fin de rescatar y documentar la cultura y tradiciones de la provincia.
Además, en colaboración con la Huerta Ecolenta, se lanzó la iniciativa «Biblioteca de semillas», un servicio que permite a los usuarios tomar prestadas semillas de plantas hortícolas locales, comprometiéndose a sembrarlas y, si logran cosecharlas, devolverlas al bibliobús para el beneficio de otros. Esta propuesta no solo promueve la agricultura local, sino que también busca contribuir al mantenimiento del patrimonio natural de las comunidades.
El delegado de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Fernández-Montes, subrayó la relevancia de esta labor, destacando que “fomenta el hábito lector, genera iniciativas culturales y preserva la cultura de nuestra tierra, las tradiciones y el folklore”. Además, reconoció el esfuerzo del personal del servicio, quienes actúan como verdaderos portadores de cultura en la provincia.
vía: Diario de Castilla-La Mancha