El vicepresidente segundo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, ha calificado como «una barbaridad» el anuncio del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre la imposición de un arancel del 200% al vino de la Unión Europea. Durante una reciente rueda de prensa, Caballero instó a los 27 países miembros de la UE a responder con firmeza ante esta medida que, según él, pone en riesgo los intereses del sector vitivinícola europeo.
El vicepresidente argumentó que la decisión es «radical y sin sentido», ya que perjudica injustamente a los productores de vino y mosto de la región. No obstante, trató de tranquilizar al sector, aclarando que Estados Unidos no es uno de los principales mercados compradores del vino de Castilla-La Mancha. La mayor parte de las exportaciones de la región se dirigen a Europa, con Alemania, Francia e Italia como principales destinos.
Caballero señaló que, aunque las ventas a Estados Unidos representan una cifra considerable, entre 18 y 20 millones de euros anuales, esta cantidad no es fundamental para el negocio exterior de las bodegas y cooperativas de Castilla-La Mancha. En este sentido, mencionó que el Gobierno regional está en diálogo con el Ejecutivo central y la Unión Europea para evaluar las repercusiones del arancel y buscar soluciones adecuadas.
Asimismo, el vicepresidente recordó que la UE tiene capacidad para reaccionar ante esta situación, citando ejemplos de medidas de represalia anteriores, como las impuestas en relación con el aluminio y el acero, lo que refuerza la necesidad de actuar decididamente ante esta nueva amenaza al comercio.
Caballero también destacó la importancia de diversificar los mercados, haciendo hincapié en la calidad y competitividad de los vinos de Castilla-La Mancha, lo que podría abrir nuevas oportunidades en mercados emergentes. A pesar de las preocupaciones generadas por el anuncio de Trump, se mostró optimista respecto al futuro del sector, anticipando un año 2024 «espectacular» en exportaciones, con un total estimado de 927 millones de euros, a pesar de una disminución en la cantidad de producto vendido, lo que se compensará con un aumento en los precios.
vía: Diario de Castilla-La Mancha