La Calle Aduana se ha transformado en un vibrante escenario de devoción y belleza para la esperada procesión de Nuestra Señora de Gracia Coronada, que tendrá lugar en Puertollano el 8 de septiembre. La Asociación Cofrade El Capirote ha trabajado arduamente, por séptimo año consecutivo, para engalanar esta emblemática vía con un despliegue de elementos decorativos que rinden homenaje a la patrona.
A primera hora de la mañana, los residentes pudieron apreciar cómo el tramo más estrecho de la Calle Aduana se iluminaba con una gran fotografía de la virgen, que mide tres metros de longitud y está acompañada por dos letanías. Este año, como novedad, se han incorporado dos banderas históricas, con más de 75 años de antigüedad, cedidas por la Cofradía de Caballeros de Nuestra Señora de Gracia.
A lo largo de los 200 metros del recorrido, los visitantes encontrarán un festín visual: guirnaldas coloridas, pancartas con lemas marianos y gallardetes de damasco azul inmaculado que exhiben el monograma dorado de la Virgen María, creando un ambiente único para esta celebración.
La asociación ha agradecido especialmente la colaboración de diversas instituciones, como la Residencia de Mujeres de las Hermanas de la Cruz, Antonio Fernández Jurado y Albertia, que han contribuido a la elaboración de las guirnaldas. Asimismo, el Centro de Día Mayor Vida ha donado el material necesario para su confección, mientras que los socios, vecinos y comercios de la calle han mostrado su implicación y cariño en la antigüa tradición.
Los preparativos culminarán el lunes con la tradicional petalá, un emotivo gesto en el que se lanzarán más de 12 kilos de pétalos de rosas y claveles al paso de la Virgen. Esta manifestación de fervor se hace posible gracias a las aportaciones y donativos de numerosos devotos que apoyan la celebración. La Calle Aduana, embellecida y llena de vida, promete ser el escenario perfecto para un evento que une a la comunidad en un ambiente de fe y agradecimiento.
vía: Diario de Castilla-La Mancha