La Dra. María del Carmen Hernández, neumóloga y Responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Quirónsalud Vitoria, destaca la importancia de estar alerta ante el agravamiento de los síntomas de la apnea del sueño durante los periodos de calor intenso. En estos momentos, el calor extremo puede afectar la calidad del sueño nocturno, lo que a su vez intensifica el cansancio y la somnolencia en los pacientes no diagnosticados con este trastorno respiratorio.
La apnea del sueño es una condición en la que las personas experimentan pausas en la respiración durante el sueño, lo que provoca que el cerebro tenga que despertarse parcialmente para restablecer la respiración. Estas interrupciones fragmentan el sueño y ocasionan un descanso de mala calidad. La Dra. Hernández señala que los afectados suelen experimentar fatiga continua, dolores de cabeza, irritabilidad, dificultad para concentrarse y un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares como hipertensión, arritmias y accidentes cerebrovasculares.
Para diagnosticar la apnea del sueño, la especialista menciona que se realiza una polisomnografía, un estudio del sueño que analiza la actividad cerebral, respiratoria y cardíaca durante el descanso. En cuanto al tratamiento más efectivo, la Dra. Carmen Hernández destaca la terapia con presión positiva continua en la vía aérea (CPAP), un método que consiste en suministrar aire a presión a través de una mascarilla para mantener las vías respiratorias abiertas durante el sueño.
Es fundamental que el tratamiento de la apnea del sueño sea personalizado y se adapte a las necesidades de cada paciente, según indica la Dra. Hernández. La elección de la terapia más adecuada dependerá de la gravedad de la enfermedad, la presencia de otras patologías y las preferencias del afectado.
Para muchos, el verano es una temporada de disfrute y relajación, pero para quienes sufren de apnea del sueño, las altas temperaturas pueden representar un desafío adicional para su calidad de vida. Durante los meses más cálidos del año, es importante tomar precauciones y cuidar la salud respiratoria para minimizar los efectos adversos de la apnea del sueño.
La Dra. Hernández recomienda algunas medidas que los pacientes con apnea del sueño pueden tomar para mejorar su descanso durante el verano. En primer lugar, es aconsejable mantener la habitación fresca y bien ventilada, utilizando aire acondicionado o ventiladores si es necesario. También se sugiere evitar el consumo de alcohol y comidas pesadas antes de acostarse, ya que pueden empeorar los síntomas de la apnea del sueño.
Además, es importante seguir el tratamiento prescrito por el especialista y utilizar el CPAP de forma regular, incluso en los días más calurosos. La Dra. Hernández enfatiza la importancia de no interrumpir el tratamiento, ya que el CPAP ayuda a mantener las vías respiratorias abiertas y a mejorar la calidad del sueño, incluso en condiciones climáticas adversas.
Por otro lado, la neumóloga destaca la importancia de mantener un estilo de vida saludable, que incluya una dieta equilibrada, ejercicio regular y mantener un peso adecuado. La obesidad es un factor de riesgo importante para la apnea del sueño, por lo que controlar el peso puede ayudar a reducir la severidad de los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
En resumen, la Dra. María del Carmen Hernández subraya la importancia de estar alerta a los efectos del calor intenso en los pacientes con apnea del sueño, y de tomar las medidas necesarias para proteger la salud respiratoria durante los meses de verano. Con un enfoque personalizado en el tratamiento y un estilo de vida saludable, es posible controlar los síntomas y mejorar la calidad de sueño de quienes padecen este trastorno respiratorio.