Las competiciones de balonmano vuelven al ruedo esta semana tras un parón por las selecciones, y los aficionados ya pueden anticipar dos encuentros llenos de emoción. El equipo de Caserío, dirigido por Santi Urdiales, se prepara para enfrentar al Puerto de Sagunto el miércoles en la primera eliminatoria de la Copa del Rey, seguida de un esperado derbi contra BM Guadalajara el domingo, que se presenta como un partido clave para su desempeño en la liga.
El duelo contra Sagunto será un reto significativo para Caserío, que busca superar la consistencia mostrada por su rival, quien actualmente ocupa la cuarta posición en la División de Honor Plata. Después de un inicio algo irregular en la temporada, Sagunto demostró ser un rival comprometido y difícil de vencer en su cancha, especialmente recordando los intensos enfrentamientos de la temporada pasada que resonaron entre los seguidores de la localidad.
Santi Urdiales tiene confianza en que sus jugadores ofrezcan su mejor versión en este torneo, donde Caserío ha tenido destacadas actuaciones en años anteriores. El equipo ha mantenido a sus jugadores clave y, al mismo tiempo, ha incorporado nuevas caras al plantel, destacando el retorno de Paquillo Ruiz, quien aporta una carga emocional al ser un antiguo jugador del club. Para él, el encuentro tiene un significado especial.
A medida que el equipo se enfoca en la Copa del Rey, también deben reconocer la realidad de ser considerados rivales a la altura en la élite del balonmano. Además, la reciente salida de David Fernández ha generado incertidumbre en el grupo, lo que obliga a Caserío a adaptarse rápidamente a los cambios mientras se preparan para estas dos importantísimas citas que marcarán el rumbo del equipo en la temporada. Con la afición al borde de la emoción, tanto el partido de la Copa del Rey como el derbi prometen ser espectáculos dignos de seguir.
