Toledo, 15 de septiembre de 2025. El Instituto Regional de Seguridad y Salud Laboral ha sido anunciado con un presupuesto de tres millones de euros para 2026, marcando un hito en la inversión en este sector en Castilla-La Mancha que, por primera vez, superará los diez millones de euros. La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, hizo el anuncio durante la presentación del Instituto en el Palacio de Fuensalida, presidido por el presidente regional, Emiliano García-Page.
Franco destacó la colaboración entre el Gobierno de la región y los representantes de la patronal CECAM y de los sindicatos CCOO y UGT, enfatizando el esfuerzo conjunto que ha permitido la creación de este Instituto. Este es el primero del tipo en la comunidad, y subrayó que desde 2015, la inversión en seguridad laboral ha crecido ocho veces, pasando de 1,18 millones a los tres millones previstos para el próximo año.
El aumento en el número de inspectores y subinspectores de trabajo fue otro de los puntos mencionados; este ha pasado de 84 a 122 en un periodo de cinco años. Las intervenciones de la Inspección de Trabajo en materia de seguridad también han aumentado; actualmente, más del 31% de sus actuaciones se centran en este ámbito, en comparación con el 16% de 2014.
La consejera enfatizó la labor de los técnicos de Trabajo, quienes han llevado a cabo más de 17.000 visitas a empresas para abordar la prevención de riesgos laborales desde 2020. Además, se recordó el Acuerdo Estratégico para la Prevención de Riesgos Laborales 2022-2026, que ha visto un incremento en su presupuesto superior al 50% en comparación con el anterior.
La formalización del Instituto fue reflejada hoy en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha y responde a un compromiso del presidente García-Page. Muy pronto se establecerá un Consejo Regional de Seguridad y Salud Laboral, que funcionará como un órgano asesor y de planificación.
El plan de acción, que se presentará en el primer encuentro del Instituto, incluirá diez objetivos estratégicos y cuatro bloques estructurales, formando así una hoja de ruta para los próximos tres años. Franco instó a todos los grupos políticos a colaborar en la reducción de la siniestralidad laboral, destacando la importante mejora desde 2015, donde la región pasó de tener el segundo índice más alto de siniestralidad en el país a la cuarta posición actual en el Índice de Incidencia. La consejera concluyó reafirmando el compromiso del Gobierno para garantizar que ningún trabajador pierda la vida en su puesto de trabajo.