El Gobierno de Castilla-La Mancha ha tomado la decisión de aumentar su apoyo a los Centros Especiales de Empleo, con una inversión que superará los 29,5 millones de euros. Este esfuerzo tiene como objetivo impulsar el empleo de personas con discapacidad en el mercado protegido, beneficiando a aproximadamente 5.000 trabajadores a través de los 94 Centros Especiales de Empleo que operan en la región. La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, hizo este anuncio durante la celebración del Día de la Economía Social de Castilla-La Mancha en Ciudad Real, donde también se otorgaron los II Premios Empresariales de la Economía Social.
En su discurso, Franco resaltó la importancia de la economía social en Castilla-La Mancha, un sector que abarca más de 4.000 empresas y que impacta directamente en más de 175.000 familias en la comunidad. “La economía social es un sector que tiene alma y presenta un componente social que no está reñido con la profesionalidad. Nos ayuda, especialmente en nuestras zonas más rurales, a avanzar hacia un mundo más justo y sostenible, generando empleos de calidad”, afirmó la consejera.
Durante el presente año, la economía social ha continuado registrando un crecimiento significativo, con la creación de 58 nuevas cooperativas en la región, de las cuales 14 están ubicadas en la provincia de Ciudad Real. En este contexto, Franco destacó el compromiso del Gobierno con la economía social a través de iniciativas como el Consejo Regional de Economía Social y la primera Estrategia de Economía Social de Castilla-La Mancha. La reciente ampliación de crédito, que se publicará el próximo lunes en el Diario Oficial, es un claro reflejo del respaldo del Ejecutivo autonómico a este sector fundamental.
Asimismo, la consejera anunció que se está trabajando en una nueva convocatoria de ayudas para la promoción, creación y consolidación de cooperativas y sociedades laborales. Hasta la fecha, un total de 151 cooperativas y sociedades laborales han participado en esta convocatoria, con 54 de ellas buscando ampliar su estructura mediante la incorporación de nuevos socios, lo que demuestra el crecimiento y la consolidación del sector.
Finalmente, Franco hizo un llamado a la colaboración con las universidades para promover un aprendizaje que integre los principios de la economía social desde las etapas más tempranas de la formación. Este enfoque tiene como objetivo preparar a las futuras generaciones para desarrollar modelos empresariales más inclusivos y sostenibles, garantizando así un crecimiento sólido y consistente en Castilla-La Mancha.

