La asesoría jurídica de CCOO está evaluando la posible interposición de una demanda contra el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), tras considerar que ha habido una actuación «negligente» en el laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario de Toledo. Esta evaluación se produce después de que varios empleados del laboratorio desarrollaran problemas de salud relacionados con la exposición al formaldehído, una sustancia química reconocida como cancerígena.
Chelo Cuadra, secretaria de CCOO-Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Castilla-La Mancha, hizo el anuncio durante una rueda de prensa. En ella, destacó que la Inspección de Trabajo ha ordenado la paralización de todas las actividades que implican el manejo del formaldehído en el laboratorio, lo que refleja la gravedad de la situación. Según Cuadra, se ha remitido toda la documentación necesaria a los abogados del sindicato para valorar la viabilidad de llevar a cabo acciones legales contra la Gerencia del Sescam.
La mutua Solimat también ha sido señalada en estas posibles reclamaciones, ya que, según las denuncias, no ha brindado la atención médica adecuada a los trabajadores afectados, lo que incluye la derivación de estos a sus médicos de cabecera a pesar de los evidentes problemas de salud.
El delegado de prevención del área sanitaria 1 de Toledo, José Ángel Díaz, junto al secretario general de CCOO Toledo, Federico Pérez, acompañaron a Cuadra en la comparecencia y subrayaron la urgencia de la situación. Díaz informó que aproximadamente cincuenta trabajadores del laboratorio han reportado más de un centenar de incidencias, lo que ha llevado a 32 bajas laborales. Además, advirtió sobre la posibilidad de que los problemas se extiendan a otros laboratorios, como el de Genética y Microbiología, y solicitó que se detengan todas las actividades relacionadas, dado que algunos trabajadores presentan síntomas graves, como pérdida de conciencia y hemorragias nasales.
Los representantes sindicales manifestaron su interés en la reunión programada con la dirección del Sescam, donde se espera que se presente un plan de contingencia para abordar la paralización de actividades en el laboratorio. Díaz hizo hincapié en la necesidad de contar con un protocolo de mascarillas más eficaz que proteja a los trabajadores frente a productos químicos peligrosos.
Cuadra subrayó la necesidad de reanudar las negociaciones sobre la reubicación y las condiciones laborales de los profesionales afectados, alertando sobre el tenso clima entre los trabajadores y el Sescam, que, a su juicio, ha incumplido su obligación de proteger a su personal. Pérez, por su parte, resaltó la decisión de la Inspección de Trabajo como un acto valiente y necesario, considerando los riesgos que enfrentan los empleados del laboratorio, y concluyó mencionando la sensación de abandono que han sentido los delegados de CCOO en relación a la gerencia del Sescam durante este prolongado proceso.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
