En un año marcado por un preocupante aumento en la siniestralidad laboral, que ha registrado un incremento del 30% en accidentes mortales en comparación con el año anterior, se produjo un nuevo incidente trágico en la jornada de ayer. Un trabajador perdió la vida al caer al vacío mientras realizaba labores de construcción en un puente de la autovía A-32, situado en el término municipal de Balazote.
Este trágico suceso ha generado inquietud entre las autoridades de seguridad laboral, que ya venían alertando sobre la alarmante tasa de accidentes en el sector. El caso de Balazote refleja una realidad preocupante en la que las condiciones de seguridad en el ámbito de la construcción continúan siendo insuficientes, a pesar de los esfuerzos por mejorar los estándares y la implementación de protocolos de prevención.
La autovía A-32, considerada un punto neurálgico de conexión, se convierte así en el escenario de un accidente que suma una víctima más a la lista de vidas perdidas en el ejercicio de sus funciones laborales. En este contexto, la Inspección de Trabajo ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias que rodearon el incidente y determinar posibles responsabilidades. Al mismo tiempo, el sector de la construcción se enfrenta a un desafío crítico para revertir esta tendencia y garantizar la seguridad de los trabajadores en un entorno que, con frecuencia, expone a riesgos elevados.
La comunidad de Balazote y los trabajadores del sector lamentan profundamente esta pérdida, que subraya la urgencia de implementar medidas más efectivas y rigurosas para proteger a quienes se desempeñan en este tipo de obras. La seguridad laboral, una vez más, se presenta como una prioridad ineludible que no admite demoras.
vía: Diario de Castilla-La Mancha