La dirección deportiva del Cádiz CF ha realizado una notable gestión en 2025, enfocándose en la incorporación de jóvenes futbolistas de gran calidad que ya se han convertido en pilares del proyecto liderado por Gaizka Garitano. Este cambio de enfoque marca el fin de una era dominada por jugadores veteranos como Escalante y Rubén Alcaraz, que ofrecieron un nivel excepcional en LaLiga EA Sports. Ahora, el club apuesta por una nueva filosofía de fichajes centrada en el futuro y el rendimiento a largo plazo.
Varios de estos talentos emergentes están alcanzando un nivel clave para el entrenador, generando la expectativa de que podrían superar el récord de transferencia más alto en la historia del club. Con una cifra actual de 7,5 millones de euros, establecida por la venta de Théo Bongonda al Spartak de Moscú, jugadores como Bojan Kovacevic y Mario Climent están demostrando su potencial en el campo.
El objetivo del Cádiz CF no es solo aumentar su valor en el mercado, sino también garantizar un rendimiento sólido en el campeonato. Además de Kovacevic y Climent, otros futbolistas como Efe Ugiagbe, Iuri Tabatadze y Moussa Diakité también están mostrando un notable crecimiento. A medida que el club busca regresar a la élite del fútbol español, retener a estos jóvenes talentos se convierte en una prioridad absoluta. La estrategia adoptada no solo busca revalorizar al equipo, sino también formar un plantel competitivo que aspire a grandes objetivos en el futuro.
