La Feria de Albacete se ha convertido en el escenario ideal para que El Bonillo presente su riqueza cultural y patrimonial a los visitantes. El evento, que tuvo lugar en el stand de la Diputación, contó con la destacada participación de Santi Cabañero, presidente de la Diputación, quien no dudó en ensalzar la grandeza de la Feria y la relevancia de El Bonillo en la provincia, a quien describió como «una nación».
El 11 de septiembre de 2025, dedicado a la Discapacidad, se subrayó el compromiso con la igualdad, con la labor de Aida, interprete de lengua de signos, asegurando la accesibilidad de la información para todos los presentes. Esta jornada fue una oportunidad para visibilizar el esfuerzo colectivo por integrar a todas las personas.
Uno de los temas destacados fue el oficio del pastor, que ha sabido adaptarse a los avances tecnológicos sin perder su esencia. Cabañero, con raíces pastoriles, enfatizó la importancia de reconocer a quienes se dedican a esta noble profesión, fundamental en la cultura y la economía de la región.
El Bonillo, ubicado en la comarca del Campo de Montiel, se presentó como un referente del pastoreo extensivo y de la tradición quesera. Con paisajes naturales variados y una rica herencia cultural, el municipio celebra anualmente una feria donde se destaca su patrimonio pastoril. Durante esta edición, Mari Carmen y Leandro ofrecieron una demostración en directo de la elaboración de queso, compartiendo sus historias personales ligadas a este sector.
El alcalde de El Bonillo, Juan Gil, manifestó con orgullo las capacidades de su pequeño pueblo para brindar servicios de calidad, así como la inversión en la mejora de la atención a las personas mayores y la diversidad cultural que enriquece la comunidad durante todo el año.
El vicepresidente Fran Valera, por su parte, resaltó la importancia de dar visibilidad al oficio pastoril y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del campo. En esta línea, instó a otorgar el reconocimiento y el valor adecuado a aquellos que producen alimentos esenciales.
Mirando hacia el futuro, Valera también mencionó las energías renovables como una posible fuente de empleo en la región. La jornada concluyó con una degustación de queso de El Bonillo, donde los asistentes se llevaron como obsequio una cuña de queso y una pulsera con la insignia «El Bonillo es una nación».
Este evento en la Feria de Albacete fue un homenaje a El Bonillo, evidenciando cómo su patrimonio cultural y orgullo pueden trascender más allá de sus fronteras.
vía: Diario de Castilla-La Mancha