El Bonillo vivió el pasado día una jornada intensa y llena de devoción en honor al Cristo de los Milagros, un evento que logró llevar a cabo su programación pese a la incertidumbre meteorológica que se dejó sentir a lo largo del día. Desde primeras horas se especulaba sobre la posibilidad de lluvia, lo que generó dudas acerca de la realización de algunas actividades, especialmente la tan esperada procesión de la tarde.
A pesar de las inquietudes atmosféricas, todos los actos se desarrollaron según lo planeado, lo que fue motivo de alegría para los asistentes. La celebración comenzó con una Santa Misa a las 9:00 horas, que fue seguida de una Función Solemne al mediodía y del Inicio de la Adoración a las 16:00 horas. Cada uno de estos momentos reunió a numerosos vecinos, que demostraron su profundo arraigo con esta festividad local.
El acto culminante de la jornada, la procesión del Cristo de los Milagros, se llevó a cabo sin grandes contratiempos, a pesar de algunas ligeras precipitaciones que se registraron durante el recorrido. El cortejo, que avanzó con solemnidad, estuvo acompañado por una multitud de fieles, quienes siguieron con fervor los pasos de la imagen. La Banda Municipal de Música aportó una nota especial a la ceremonia, enriqueciendo la experiencia de todos los presentes.
A pesar de las amenazas del clima, la jornada se desarrolló sin incidentes notables, y la gran afluencia de vecinos evidenció una vez más el compromiso de la comunidad con esta venerada celebración. El ambiente de orden y recogimiento que se vivió fue propicio para el buen desarrollo de los actos, consolidando así una festividad que continúa siendo un referente en la localidad, uniendo a los vecinos en torno a sus tradiciones más queridas.