El consejero de Agricultura de Castilla-La Mancha, Julián Martínez Lizán, ha defendido la gestión del Gobierno autonómico durante un debate en las Cortes de la región, enfatizando el apoyo al sector primario y agroalimentario, al que ha calificado como «fuerte y competitivo». Estas declaraciones surgen en medio de las críticas de la oposición, incluyendo al Partido Popular (PP) y Vox, quienes intentaron cuestionar la efectividad de las políticas implementadas en el sector.
Durante su intervención, Martínez Lizán resaltó que la contribución del sector agroalimentario al Producto Interno Bruto (PIB) de Castilla-La Mancha ha crecido del 12% al 18% desde la llegada de Emiliano García-Page a la presidencia. También subrayó que en 2024 se han realizado inversiones históricas en ayudas directas, que superan los 1.046 millones de euros, lo que pone de manifiesto el compromiso del Gobierno con este sector vital.
El consejero expresó su preocupación por la «inestabilidad» generada por la política arancelaria del presidente estadounidense Donald Trump. Sin embargo, destacó que la balanza comercial entre Castilla-La Mancha y Estados Unidos es positiva, con exportaciones que alcanzan los 130 millones de euros en contraste con importaciones que suman 70 millones. Además, Martínez Lizán mencionó el crecimiento global de las exportaciones agroalimentarias, que han experimentado un incremento del 75% desde 2015, enfatizando la calidad del sector como un factor clave en este éxito.
La oposición no tardó en responder. Luis Blázquez, de Vox, criticó las políticas socialistas, sosteniendo que no han estado a la altura de las necesidades del sector primario. Señaló problemas como la burocracia excesiva, la competencia desleal y el abandono del medio rural, y propuso soluciones como la reducción de impuestos, la defensa del producto nacional, una mejor gestión del agua y un mayor apoyo a la ganadería y agricultura, así como un impulso al relevo generacional.
Desde el PP, Itziar Asenjo salió a acusar al Gobierno regional de dejar al sector agrario en una situación precaria, mencionando la PAC «asfixiante» y los obstáculos burocráticos. También abogó por un relevo generacional en el campo y se pronunció a favor de una ley que proteja los productos locales frente a los aranceles de Estados Unidos.
Por su parte, Ángel Tomás Godoy, del PSOE, advirtió sobre los riesgos que los aranceles de Trump representan para los avances logrados en el sector, y criticó a Vox por alinearse con posiciones extremas que amenazan los acuerdos verdes necesarios para el financiamiento agrícola.
Al final del debate, las resoluciones propuestas por Vox y el PP fueron rechazadas, mientras que la propuesta presentada por la mayoría socialista en el Parlamento fue la única aceptada. La situación del sector agroalimentario de Castilla-La Mancha sigue siendo un tema de debate central, con diferentes visiones sobre el futuro y la dirección que deben tomar las políticas en este ámbito.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
