El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado una significativa inversión de 13,2 millones de euros destinada a mejorar la atención a personas con discapacidad intelectual en la región. Esta inversión se distribuirá en tres contratos que abarcarán centros residenciales ubicados en Albacete, Toledo y Ciudad Real. Esther Padilla, portavoz del Ejecutivo regional, ha enfatizado que estos acuerdos son cruciales para fortalecer la red pública de apoyo a las personas más vulnerables, garantizando un modelo centrado en la calidad.
Uno de los principales contratos se refiere a la gestión del Centro de Atención a Personas con Discapacidad Intelectual (CADI) ‘La Piedra Encantada’, en Abengibre, Albacete. Con una inversión superior a 8,2 millones de euros, el centro ofrecerá 40 plazas residenciales y diez de centro de día, proporcionando servicios esenciales como apoyo personal, atención sanitaria, y transporte adaptado. La duración inicial del contrato será de tres años, comenzando el 1 de diciembre de 2025, con opción de prórroga.
Además, se ha aprobado un contrato para la gestión integral de la residencia ‘Santa Teresa’ en Villafranca de los Caballeros, Toledo, con una inversión que supera los 3,1 millones de euros. Esta residencia contará con 34 plazas y ofrecerá servicios vitales de atención y soporte, comenzando su vigencia el 1 de noviembre de 2025.
El tercer acuerdo se centra en el CADIG ‘Guadiana’ en Ciudad Real, donde se destinarán 1,9 millones de euros para el servicio de restauración. Este servicio proporcionará alimentación saludable a las 105 personas usuarias del centro, tanto residentes como aquellas que utilizan el servicio de estancias diurnas, con un inicio previsto para el 1 de enero de 2026.
Padilla ha destacado que estos contratos representan una forma de dignidad para las personas con discapacidad, permitiendo que muchas vivan con calidad y en su entorno. En palabras de la portavoz, estos acuerdos son más que una cuestión presupuestaria; son una necesidad humana.
En paralelo a la inversión en atención a la discapacidad, el Consejo de Gobierno ha declarado el Pozo de Nieve de Villajos en Campo de Criptana como Bien de Interés Cultural (BIC), reconociendo su valor histórico y arquitectónico. Este inmueble, que data de 1752, era esencial para almacenar nieve y hielo, y hoy alberga un Centro de Interpretación.
Padilla ha resaltado la importancia de preservar este tipo de patrimonio, cuya declaración podría dinamizar el entorno cultural y turístico de la región, asegurando que las huellas del pasado continúan siendo parte de la historia viva de Castilla-La Mancha.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
