En el contexto actual del deporte en Puertollano, Ángel Aguilar ha expresado una visión que oscila entre la preocupación y la esperanza. Durante su intervención, Aguilar describió el estado del deporte local como crítico, comparándolo con un paciente que requiere «respiración asistida». Sin embargo, su discurso no se limitó al diagnóstico, sino que también se centró en iniciativas concretas destinadas a mejorar la situación.
La Asociación para el Desarrollo Deportivo de Puertollano (ADEPU) juega un papel crucial en este esfuerzo de revitalización. Aguilar destacó la importancia de esta asociación, que trabaja en colaboración con el ayuntamiento y múltiples clubes deportivos para cohesionar y potenciar la actividad deportiva en la localidad. La iniciativa busca no sólo recuperar la infraestructura deportiva, sino también crear un entorno accesible y unido para todos los deportistas, desde aficionados hasta profesionales.
El compromiso de ADEPU, según Aguilar, es esencial para hacer frente a los recursos limitados que actualmente afectan al deporte en Puertollano. Subrayó la necesidad de una inversión y apoyo continuados, no solo para mejorar el rendimiento de los atletas locales, sino también para cultivar un sentido de comunidad y bienestar entre los habitantes de la ciudad.
El balance de las palabras de Aguilar es mixto. Reconoce las dificultades y retos inmediatos que enfrenta el deporte en Puertollano, pero también comparte un optimismo cauteloso sobre el futuro. Este optimismo se fundamenta en el esfuerzo conjunto de ADEPU, el gobierno local y otras partes implicadas. La propuesta de un enfoque holístico, que no solo persigue resultados inmediatos sino que apunta hacia el cultivo de una cultura deportiva sólida y sostenible, podría ser la clave para reavivar la pasión y el espíritu deportivo en Puertollano.
