Amaia Montero ha vuelto a ser noticia, no por su carrera musical, sino por un proyecto personal que ha transformado su hogar en Irún. La exvocalista de La Oreja de Van Gogh ha renovado su buhardilla, convirtiéndola en un refugio de tranquilidad y estilo. Este nuevo espacio refleja su búsqueda de simplicidad y pureza, con una decoración que combina armónicamente tonos blancos y texturas de madera, creando un ambiente que irradia calidez y serenidad.
La cantante ha tenido como prioridad el diseño minimalista moderno, donde la luz natural inunda el espacio gracias a ventanas estratégicamente posicionadas. Los tonos blancos dominan el diseño, amplificando la frescura del lugar, mientras que la madera, en contraste, aporta una calidez rústica que complementa perfectamente la modernidad del blanco. Cada elemento de la habitación, desde los muebles hasta los detalles decorativos, ha sido cuidadosamente seleccionado por Amaia, reflejando su identidad y estilo únicos.
Más que un simple lugar de retiro, esta buhardilla renovada se ha convertido en una fuente de inspiración para la artista. «Es un espacio que me da mucha paz, donde puedo componer, leer o simplemente estar en silencio», confesó recientemente en una entrevista. Este rincón de su hogar es testimonio de cómo un ambiente puede fomentar la creatividad y el bienestar personal.
A través de sus redes sociales, los seguidores de Amaia han podido vislumbrar su acogedora buhardilla, destacando su buen gusto y la habilidad para crear un entorno refinado. Con este ambicioso proyecto, la cantante no solo ha reinventado una parte de su casa, sino que también ha demostrado cómo un hogar puede ser un reflejo de su arte y su incesante búsqueda de belleza y paz interior. Así, esta nueva buhardilla no solo ilumina su hogar en Irún, sino que también simboliza su inalterable estilo y creatividad.