La consejera Portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, defendió este miércoles la lealtad del presidente regional, Emiliano García-Page, al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Según Padilla, García-Page demostró su lealtad en un contexto complicado durante una crisis económica, y lamentó que Zapatero cuestione dicha lealtad, acusándolo de defender «lo indefendible» como un «fan» del actual presidente Pedro Sánchez.
Durante una rueda de prensa, Padilla fue interrogada sobre los comentarios de Zapatero, quien había afirmado en una entrevista en RTVE que «la lealtad es un valor imprescindible en la vida política». La consejera respondió enfatizando que Zapatero parece haber olvidado la lealtad que García-Page manifestó en el pasado. «Ser leal con los principios implica a veces también decir la verdad y dar la opinión cuando se cometen errores», aseguró Padilla, añadiendo que actuar en contrario sería comparable a defender lo indefendible.
Además, Padilla subrayó que el rol actual de Zapatero debería ser más crítico. Recordó que en 2011, cuando el Gobierno de Castilla-La Mancha comenzaba a advertir sobre la crisis económica, el propio Zapatero reconoció que fue un error no haberla reconocido antes.
En otro orden de cosas, Padilla se refirió a la carta que el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha anunciado para solicitar un Consejo de Política Fiscal y Financiera urgente sobre la financiación autonómica, tras las negociaciones bilaterales con Cataluña. Aunque no tenía información sobre si dicha carta había sido enviada, Padilla manifestó su preocupación y subrayó la importancia de discutir la financiación adecuada para Castilla-La Mancha.
La consejera dejó claro que la comunidad no puede aceptar un modelo que favorezca a una sola región en lugar de establecer un pacto entre todas. “La mejor manera de evitar esos ‘privilegios’ es cumplir con el principio de solidaridad que establece la Constitución española y que defiende el PSOE”, concluyó, reafirmando que se requiere un modelo de redistribución de la riqueza donde los que más tienen contribuyan en mayor medida. Esta, según Padilla, es una «línea roja que no vamos a admitir».
vía: Diario de Castilla-La Mancha