El Gobierno de Castilla-La Mancha ha reafirmado su compromiso con una gestión del agua que se basa en criterios de legalidad, equidad y sostenibilidad. Esta afirmación ha sido realizada por la portavoz del Ejecutivo regional, Esther Padilla, quien enfatizó la importancia de cumplir con las leyes, las sentencias del Tribunal Supremo y las directivas europeas en la materia.
En una reciente rueda de prensa, Padilla respondió a las críticas del conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca de la Generalitat Valenciana, Miguel Barrachina. La portavoz le instó a actuar con la misma responsabilidad institucional que demuestra el Gobierno de Castilla-La Mancha. “El presidente García-Page defiende que se cumpla el Plan Hidrológico aprobado y vigente, que exige la modificación de las reglas de explotación para asegurar el caudal mínimo del río Tajo”, destacó Padilla, quien subrayó que esta es una “necesidad urgente que no admite más demoras”.
Asimismo, la portavoz subrayó que el Gobierno de García-Page está “presionando” para asegurar que se cumpla la ley y garantizar los caudales ecológicos del Tajo, como lo dictan cinco sentencias del Tribunal Supremo. “Eso es exactamente lo que deberían hacer todas las administraciones públicas: respetar y aplicar estas sentencias”, concluyó.
La defensa de una gestión sostenible del agua por parte del Gobierno regional se enmarca en un contexto en el que las cuestiones hídricas son objeto de debate y preocupación, tanto a nivel local como nacional. La adecuada regulación y gestión de este recurso vital sigue siendo una prioridad en la agenda del Ejecutivo de Castilla-La Mancha.
vía: Diario de Castilla-La Mancha