Toledo, 11 de diciembre de 2025.- En su reciente comparecencia en las Cortes Regionales, el consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Fernández Sanz, presentó un balance positivo sobre los programas de detección precoz de cáncer en la región, destacando que de los tres programas existentes, dos han sido implementados durante la presidencia de Emiliano García-Page.
Fernández Sanz ofreció detalles sobre los hitos de cada programa: el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama, que se inició en 1992 y fue extendido a toda la comunidad en 1996, el Programa de Detección de Cáncer de Colon, que comenzó a finales de 2015 y tuvo su plena implementación en 2016, y el Programa de Atención Precoz de Cáncer de Cérvix, lanzado en 2019. Estos programas constituyen una oferta integral de cribados destinados a la detección temprana de diferentes tipos de cáncer, especialmente dirigidos a la población sana.
El consejero subrayó la significancia de estas iniciativas, las cuales permiten identificar lesiones sospechosas en fases iniciales, facilitando que aquellos que presentan indicios de enfermedad sean derivados a las especialidades adecuadas para un diagnóstico y tratamiento oportuno.
Entre los aspectos destacados, Fernández Sanz se refirió al programa de mamografías para la detección precoz de cáncer de mama en Talavera de la Reina, mencionando que el director general de Salud Pública informó sobre la armonización del programa, que ha invitado a casi 5.000 mujeres a participar.
Fernández Sanz también justificó las inversiones que el Gobierno regional ha realizado en el sector sanitario, afirmando que en la última década se han ampliado significativamente los recursos médicos, concentrándose en el ámbito oncológico, donde la región tradicionalmente ha mostrado un desfase en comparación con otras comunidades autónomas.
Ante las críticas del portavoz del Partido Popular, el consejero rechazó las acusaciones y defendió que su partido nunca habría considerado dotar a todas las provincias de la infraestructura y equipos necesarios para el tratamiento del cáncer, lo que, según él, ha impedido el avance en la asistencia sanitaria en Castilla-La Mancha. En este contexto, reafirmó el compromiso del Gobierno regional por mejorar la salud pública y los programas de detección precoz, con el objetivo de reducir la incidencia del cáncer en la comunidad a través de la prevención.

