Campo de Criptana brilla con un concierto a la luz de las velas
Campo de Criptana, un encantador municipio de Ciudad Real, se convirtió el pasado 12 de enero de 2025 en el centro de atención cultural de la región, al albergar un evento que combina música, tradición y comunidad. El Teatro Cervantes fue el escenario del concierto ‘Música de cine a la luz de las velas’, una iniciativa organizada por la Hermandad de San Sebastián, en el marco de las festividades en honor a este santo.
La viceconsejera de Cultura y Deportes, Carmen Teresa Olmedo, asistió al evento junto al alcalde de Campo de Criptana, Santiago Lázaro, subrayando el compromiso del Gobierno regional, liderado por Emiliano García-Page, en el apoyo a las manifestaciones culturales locales. Olmedo destacó la música no solo como un mero espectáculo, sino como un poderoso medio de expresión y conexión entre las personas.
El evento recibió una subvención de casi 3.000 euros por parte de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y lo recaudado por las entradas se destinará a la rehabilitación de la Ermita de San Sebastián. Este enfoque en la conservación del patrimonio no solo resalta la importancia de la cultura, sino que también demuestra un compromiso tangible hacia el bienestar de la comunidad local.
El Cuarteto de Cuerda Film Sting Quartet, integrado por jóvenes talentosas de la región, fue el encargado de deleitar al público con emblemáticas bandas sonoras de la historia del cine. Compuesto por Sara Díaz-Ropero (Primer Violín), Alicia del Valle (Segundo Violín), Aitana Braojos (Viola) y Rocío Muñoz (Violonchelo), este cuarteto ha ganado reconocimiento por su constante formación y participación en diversas orquestas, facilitando el acceso a la música clásica a un público más amplio.
El repertorio abarcó desde los inolvidables temas de ‘Cinema Paradiso’ y ‘El último Mohicano’, hasta las emotivas melodías de ‘Ha nacido una estrella’ y ‘Bohemian Rhapsody’. Olmedo describió el espectáculo como “una experiencia que toca los sentidos” y que evoca memorias y emociones, resaltando el impacto que este tipo de eventos tiene en la audiencia.
La atmósfera, realzada por la iluminación de centenares de velas, creó un ambiente íntimo y cálido, convirtiendo el concierto en una experiencia inolvidable. Con iniciativas como esta, Campo de Criptana no solo reafirma su lugar en el panorama cultural de la región, sino que también honra sus tradiciones y promueve un sentido de comunidad a través de la música.
