En una decisión que marca un punto de inflexión en su trayectoria, el Manzanares CF ha optado por despedir al dúo técnico compuesto por Julián Alcolea y Reyes Albandea. Esta medida se produce tras una racha de resultados desfavorables que ha llevado al equipo a ocupar la última posición en la tabla del torneo, lo que ha impulsado a la directiva a realizar cambios en busca de un mejor rendimiento.
Para ocupar el cargo dejado por Alcolea y Albandea, el club ha tomado la decisión de confiar en Kiko Vilches, un entrenador originario de Toledo. Vilches es reconocido por su enfoque táctico y su habilidad para revitalizar equipos en situaciones complicadas. Su llegada representa un cambio de filosofía y metodología en el banquillo del Manzanares CF, un movimiento que se espera traiga consigo un nuevo aire y un impulso positivo al conjunto.
La reacción de la comunidad y los aficionados del equipo ha sido optimista y esperanzadora, con muchos depositando sus ilusiones en la nueva etapa que se abre con la llegada de Vilches. A pesar de que el reto que tiene por delante es significativo, la confianza en su capacidad para revertir la complicada situación del equipo es evidente.
Con una expectativa renovada, el Manzanares CF y su afición aguardan los resultados de esta apuesta audaz. El tiempo será el juez que determine si la directiva ha tomado la decisión correcta y si el nuevo entrenador logrará revitalizar la plantilla y mejorar su posición en la liga.
