El PSOE de Castilla-La Mancha ha logrado, gracias al apoyo del Grupo Parlamentario Popular, la aprobación en las Cortes de una propuesta que exige la creación de un nuevo borrador del Real Decreto para modificar las reglas de explotación del trasvase Tajo-Segura. Esta medida se fundamenta en lo dictado por una reciente sentencia del Tribunal Supremo y fue aprobada con 17 votos a favor, sumando los diez del PP, mientras que los tres diputados de Vox se manifestaron en contra.
La iniciativa fue presentada por el diputado Francisco José Barato, quien destacó la urgencia de eliminar la prórroga referida a los caudales ecológicos y de establecerlos de manera inmediata, teniendo en cuenta las necesidades de la cuenca cedente. Barato enfatizó que este enfoque es coherente con los principios del Pacto Regional por el Agua, firmado por el PSOE y el PP en la región.
Durante su intervención, el diputado socialista lamentó la postura del PP en el Congreso, donde votaron en contra de una proposición de ley de la Asamblea de Murcia que pretendía garantizar el trasvase. Según Barato, el PP sostiene un doble discurso al defender los derechos del agua en Castilla-La Mancha mientras actúa en sentido opuesto en el ámbito nacional.
El diputado de Vox, Iván Sánchez, criticó la propuesta del PSOE, tildándola de «excusa» que impide una gestión eficaz del agua en el país. Sugirió que la solución real pasaría por la implementación de un plan nacional de agua que no se base en intereses regionales, responsabilizando tanto al PP como al PSOE de la actual situación del agua en la región.
Por su parte, la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Carolina Agudo, expresó que el balance tras la firma del pacto regional por el agua ha sido negativo. Propuso un plan nacional consensuado que priorice las necesidades de Castilla-La Mancha y criticó la gestión del Gobierno del PSOE, afirmando que no ha sabido resolver los problemas hídricos fundamentales de la región.
La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, defendió que el Gobierno de García-Page no busca anular el trasvase, pero sí rechaza que el agua se utilice de forma ineficiente. Gómez reiteró que no apoyará un plan nacional del agua que perjudique los recursos hídricos de Castilla-La Mancha, abogando por una planificación que contemple las necesidades de las diferentes cuencas en la región.
vía: Diario de Castilla-La Mancha