En la jornada del Primero de Mayo, Castilla-La Mancha se convirtió en el epicentro de manifestaciones significativas, donde Comisiones Obreras (CCOO) desempeñó un papel central. Este año, las reivindicaciones se centraron en proteger los logros alcanzados y en luchar por un futuro mejor, abogando por la reducción del tiempo de trabajo y enfrentando el alarmante número de accidentes laborales.
Durante el día, el sindicato colaboró estrechamente con UGT, organizando un total de seis manifestaciones conjuntas. Además, CCOO participó en otras tres marchas adicionales en diferentes puntos de la región, resaltando la importancia de la cooperación entre sindicatos para alcanzar cambios significativos.
Entre los temas abordados, destacó la urgente necesidad de reformar el sistema de despidos, buscando un equilibrio más justo y sostenible para los trabajadores. También se hizo hincapié en la defensa de la democracia como un pilar fundamental de los derechos laborales y el progreso social.
Las manifestaciones incluyeron un contundente llamado a poner fin a los conflictos bélicos, subrayando la conexión esencial entre la paz y el avance social. En este contexto, se enfatizó que las guerras no solo causan devastación humana, sino que además obstaculizan el desarrollo económico y el bienestar de las comunidades afectadas.
La participación en estas movilizaciones reafirmó el compromiso de los sindicatos y sus afiliados con la mejora de la calidad de vida de los trabajadores, consolidando una visión de futuro basada en la justicia social y la equidad laboral.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha
vía: Diario de Castilla-La Mancha