Con solo 24 años, el portero ciudadrealeño Daniel Santamaría ha recorrido un camino notable en el mundo del balonmano, experimentando tanto el ascenso a la Liga Asobal como el descenso de categoría. Después de una temporada complicada con el Helvetia Anaitasuna, donde enfrentó desafíos que resultaron en la pérdida de categoría, Daniel se une al UBU San Pablo Burgos, un club que ha mostrado gran interés en él y donde espera ser una pieza clave en la búsqueda del ascenso.
La temporada anterior estuvo marcada por momentos difíciles, donde varios partidos se decidieron por la mínima, generando en el portero una sensación de injusticia. A pesar de estos contratiempos, Daniel se muestra optimista sobre su nuevo reto en Burgos. Su objetivo es aumentar el tiempo de juego y contribuir al éxito del equipo, aludiendo a la solidez del proyecto que se ha planteado, que apunta hacia un futuro prometedor en la máxima categoría.
La pasión por el balonmano de Daniel se forjó en Ciudad Real, una región con una cultura deportiva vibrante que ha influido en su carrera desde sus inicios en la escuela. A lo largo de su trayectoria, ha pasado por equipos juveniles y ha dejado huella en el Balonmano Guadalajara. Su dedicación al deporte se ha visto recompensada con un título mundial con la Selección Española Universitaria, un reconocimiento del talento y la dedicación que ha demostrado a lo largo de su joven carrera.
Con la mirada puesta en el futuro, Daniel Santamaría se enfrenta a un nuevo capítulo en su trayectoria deportiva, donde sus habilidades y determinación serán clave para alcanzar nuevas metas en el balonmano.
