El Soliss BM Pozuelo se presentó en La Albericia con la esperanza de revertir una preocupante racha de derrotas, pero se encontró nuevamente con un obstáculo insuperable, cediendo ante el UNEATLANTICO Pereda en un encuentro que acentuó sus problemas en la competición. Este enfrentamiento marcó la tercera vez que el equipo manchego sale sin puntos de este recinto, sumando ya dos derrotas consecutivas en su camino.
Desde el pitido inicial, ambos equipos mantuvieron un nivel de juego bastante parejo, aunque fue el equipo local el que logró imponerse tras algunos momentos de inestabilidad. La ofensiva del Pereda resultó ser un dolor de cabeza constante para el Pozuelo, que no lograba encontrar la manera de frenar sus embates. La portera Fátima Ocampos desempeñó un papel fundamental, convirtiéndose en un muro prácticamente infranqueable para las atacantes visitantes. A pesar de los intentos de Elena Díaz, que se destacó en el encuentro al marcar siete goles, el equipo no pudo evitar que el primer tiempo concluyera con un preocupante 13-9 a favor del conjunto local.
En la segunda mitad, el Pozuelo mostró destellos de esperanza al reducir la diferencia a solo dos goles, lo que encendió la ilusión de sus seguidores. Sin embargo, la capacidad del Pereda para mantener la calma en los momentos decisivos, combinada con la efectividad de Ana Barquín y las intervenciones clave de Ocampos, mantuvieron a raya cualquier intento de remontada por parte del Soliss BM Pozuelo.
A pesar de los esfuerzos y la entrega de las jugadoras, el partido culminó con un marcador de 22-20, dejando al Pozuelo con un sabor amargo y una nueva oportunidad perdida. La búsqueda de la ansiada victoria seguirá siendo un desafío para el equipo, que deberá intensificar su trabajo para superar los obstáculos que están afectando su rendimiento en la competición.
