El enfrentamiento entre Manzanares CF y CD Villarrobledo se convirtió en un capítulo decisivo en la lucha por la permanencia en la categoría, dado que el Manzanares ocupaba la última posición de la tabla y el Villarrobledo se encontraba apenas un escalón por encima, con la sombra del descenso acechando. El ambiente en el estadio era de tensión palpable, con ambos equipos conscientes de la importancia vital de los puntos en disputa en esta fase final del campeonato.
Desde el comienzo del partido, el Villarrobledo mostró una superioridad notable, abriendo el marcador con dos goles anotados por Escribano en rápidos sucesos ocurridos en los minutos 35 y 37. Estos tantos llegaron en un momento crítico antes del descanso, dejando al Manzanares con la necesidad de reaccionar rápidamente para no ver comprometidas aún más sus aspiraciones de salvación.
A pesar de la desventaja, la determinación del Manzanares fue inquebrantable. Tras la expulsión de Armindo, el entrenador del Villarrobledo, el ambiente cambió momentáneamente y los jugadores del Manzanares aprovecharon la oportunidad para intensificar su esfuerzo ofensivo. Este ímpetu dio frutos cuando lograron marcar un gol en el minuto 75, lo que encendió la llama de la esperanza en el equipo local y en sus seguidores.
No obstante, las intenciones de Manzanares de completar la remontada fueron frustradas. El portero del Villarrobledo tuvo una actuación sobresaliente, haciendo varias atajadas clave que aseguraron la victoria de su equipo. Finalmente, el partido concluyó con un resultado que, aunque deja a ambos clubes luchando por la permanencia, proporciona al Villarrobledo un respiro importante en la apretada batalla por evitar el descenso. El Manzanares, sin embargo, sigue aferrándose a la esperanza de un milagro en las próximas jornadas del campeonato.
