Un reciente estudio realizado por un equipo de investigación liderado por Sebastian Hökby, estudiante de doctorado en el Instituto Karolinska de Suecia, ha revelado preocupantes hallazgos sobre el impacto del tiempo que los adolescentes pasan frente a las pantallas en sus hábitos de sueño. En la edición del 2 de abril de la revista PLOS Global Public Health, los investigadores concluyeron que aquellos jóvenes que reportan un mayor uso de dispositivos electrónicos experimentan deterioros en la calidad y duración de su sueño.
Esta investigación pone de manifiesto uno de los numerosos retos que enfrentan los adolescentes en la actualidad, especialmente en un mundo donde el uso de pantallas se ha convertido en un fenómeno habitual en el ámbito familiar. Con el propósito de fomentar un uso más saludable de la tecnología durante las vacaciones de Semana Santa, Julio García Gómez, director del diploma y curso de Comunicación en Salud de la Fundación Economía y Salud, ha propuesto un Plan Familiar Móvil y Pantallas (PFMP). Este plan incluye pautas, juegos y ejercicios para reestablecer el equilibrio entre la interacción familiar y el uso de dispositivos tecnológicos.
Entre las recomendaciones del PFMP, se destacan la creación de horarios restrictivos para el uso de pantallas. García Gómez sugiere que las familias planifiquen en detalle cuándo y cuánto tiempo deberán utilizar los dispositivos, enfatizando la necesidad de reservar momentos para la interacción familiar, como durante las comidas o actividades recreativas. En caso de que se rompan estas normas, se implementaría una “multa” socializadora, donde el infractor debe compartir verbalmente sus experiencias del día con el resto de la familia, promoviendo así el diálogo y la expresión emocional.
Además, el plan incluye divertidos juegos familiares diseñados para mejorar la comunicación, tales como «La cadena de la comunicación al oído», que demuestra cómo la información se puede deformar al ser transmitida, y «El arte sin límites», donde cada miembro de la familia añade su toque a un dibujo inicial, promoviendo la colaboración creativa.
Esta iniciativa busca no solo limitar el uso de pantallas, sino también ofrecer alternativas lúdicas que refuercen los lazos familiares y enriquezcan las habilidades de comunicación de cada integrante del grupo. En un tiempo donde la tecnología a menudo interfiere en la interacción humana, el PFMP se presenta como una solución innovadora para regresar a las relaciones cara a cara que fomentan un mejor desarrollo emocional y social.