El último barómetro del CIS de febrero ha puesto de relieve un panorama complicado para el Partido Popular (PP) y su líder, Alberto Núñez Feijóo. En este análisis, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) consolida su posición con un 33,4% en estimación de voto, ampliando la diferencia con los populares, que caen al 28,1%, lo que representa una pérdida de 1,6 puntos en comparación con el mes anterior. Esta situación refuerza el liderazgo de Pedro Sánchez, quien se presenta como una figura política fuerte en un contexto adverso para sus oponentes.
Mientras Vox mantiene una tendencia ascendente y alcanza un 13,3%, Sumar continúa en caída libre hasta un 6,4%. Podemos, por su parte, muestra una ligera mejora al alcanzar un 4,4%, mientras que la plataforma “Se acabó la fiesta” sufre un descenso notable hasta el 1,6%, perdiendo ocho décimas respecto a enero.
En términos de valoración, Sánchez se posiciona como el líder mejor valorado con un 4,13 sobre 10, seguido de cerca por Yolanda Díaz, que obtiene un 3,96. Núñez Feijóo, en cambio, presenta una caída en su valoración, situada ahora en 3,61, y Santiago Abascal se mantiene en el último lugar con una puntuación de 2,85. En cuanto a la preferencia para la presidencia del Gobierno, Sánchez destaca con un impresionante 43% de apoyo, dejando a Feijóo a una distancia considerable con solo el 16,3%. Otros candidatos, como Abascal y Isabel Díaz Ayuso, se quedan atrás con 11,9% y 10% respectivamente.
La encuesta también destaca la vivienda como el principal problema para los españoles, con un 34,1% de los encuestados considerándola su mayor preocupación. Esta inquietud queda seguida por la crisis económica y el paro, ambas con un 20%. Sin embargo, cuando se indaga sobre los problemas que afectan directamente a la vida diaria, la crisis económica se eleva al 30,1%, seguida de la vivienda con un 22,2% y la sanidad con un 19,4%.
El barómetro del CIS no solo ratifica el retroceso del PP y el ascenso del PSOE, sino que también refleja la actual incertidumbre que atraviesa España, marcada por la crisis de vivienda y las implicaciones de la situación económica global.