El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido enfáticamente la seguridad en su discurso sobre inmigración, en medio de la crisis migratoria que afecta a Canarias. Con más de 5.500 menores no acompañados hacinados en centros de acogida sin una solución clara para su reubicación, el PP ha elevado el tono de su discurso sobre este tema.
Feijóo subrayó la necesidad de equilibrio entre solidaridad y seguridad, insistiendo en que «los españoles tienen derecho a salir tranquilos a la calle» y que se debe respetar los valores, cultura, creencias, mujeres, homosexuales y la libertad de sentirse seguros en casa.
Ante la reciente ruptura de las coaliciones autonómicas entre el PP y Vox debido a la aceptación del PP de acoger menores migrantes, Feijóo ha adoptado una postura más firme. Ha destacado la importancia de la seguridad para todos, incluyendo a los inmigrantes que arriesgan sus vidas para llegar a España.
El líder del PP también ha criticado al PSOE por no negociar con su partido en la votación sobre la reforma de la Ley de Extranjería, subrayando que las exigencias del PP son de sentido institucional. Feijóo hizo hincapié en que España no puede ser hogar para aquellos con malas intenciones, incluso si han contribuido positivamente al país.