En la actualidad, muchas personas buscan llenar sus hogares de vida y frescura a través de la incorporación de plantas en sus espacios. Sin embargo, el reto radica en seleccionar especies que puedan sobrevivir y prosperar en entornos con iluminación natural limitada. Ante esta situación, la experiencia de los botánicos se vuelve esencial. Manuel Fernández, experto en el cuidado de plantas de interior, ha compartido sus recomendaciones sobre las cinco especies más adecuadas para hogares con poca luz.
Una de las primeras opciones que menciona Fernández es la Zamioculcas zamiifolia, conocida comúnmente como la «planta ZZ». Esta especie, originaria de África oriental, se destaca por su adaptabilidad a diferentes niveles de luz. Con sus hojas brillantes y robustas, se suma no solo al atractivo estético del hogar, sino también a su resistencia, convirtiéndola en una elección ideal para aquellos que se inician en la jardinería de interiores.
La Sansevieria trifasciata, popularmente llamada «lengua de suegra», es otra planta que destaca en la lista del especialista. Su capacidad para sobrevivir en ambientes con poca luz y su escaso requerimiento de riego la convierten en una opción cómoda de cuidar. Además, esta especie es conocida por su función purificadora, ya que absorbe toxinas y libera oxígeno durante la noche, lo que la hace perfecta para dormitorios con escasa iluminación.
El Pothos, o Epipremnum aureum, es también un recomendado por Fernández. Esta planta trepadora es famosa por su versatilidad y su capacidad de crecer en casi cualquier entorno. Sus distintivas hojas verdes en forma de corazón no solo añaden frescura y vitalidad, sino que también exigen un mantenimiento mínimo, lo que la convierte en una opción ideal para quienes buscan plantas que no demanden mucho tiempo.
Para quienes prefieren un toque floral, el Spathiphyllum, conocido como «lirio de la paz», es otra alternativa a considerar. Aunque se desarrolla mejor con luz indirecta, esta planta es capaz de florecer en condiciones de poca iluminación. Sus delicadas flores blancas producen un contraste refinado con el follaje oscuro, embelleciendo los espacios interiores.
Por último, el Philodendron hederaceum, o filodendro, surge como una planta altamente adaptable. Con sus hojas verdes y brillantes, este ejemplar es perfecto para quienes desean crear un ambiente exuberante, sin preocuparse por la necesidad de luz abundante.
Fernández subraya que, aunque estas plantas son adecuadas para condiciones de poca luz, es crucial prestar atención a otros aspectos de su cuidado, como el riego y la elección del sustrato. Siguiendo estos consejos, incluso los espacios más oscuros pueden convertirse en un vibrante oasis verde, mejorando así el bienestar de quienes habitan en ellos.
