El primer fin de semana de mayo llega cargado de festividades y planes, pero también con contratiempos. Mientras los españoles preparan sus escapadas o días de descanso, el meteorólogo Duncan Wingen advierte de la llegada de una borrasca fría aislada que afectará a varias zonas del país, complicando los desplazamientos y las actividades al aire libre. A esto se suma la suspensión de venta de entradas en PortAventura, uno de los destinos más populares para el puente, dejando a muchos sin su plan estrella.
Festivos y horarios comerciales: qué esperar
El 1 de mayo, Día del Trabajador, es festivo en toda España, pero en la Comunidad de Madrid el descanso se extiende al 2 de mayo por la Fiesta de la Comunidad. Ante la afluencia de compras previas y la necesidad de abastecerse, los supermercados ajustan sus horarios, aunque no todos abrirán.
- Mercadona: Mantendrá su política de cierre en festivos nacionales y domingos, aunque algunas tiendas en zonas turísticas podrían abrir de forma excepcional.
- Carrefour: Sus hipermercados podrían cerrar o reducir horario, mientras que los Carrefour Express suelen permanecer abiertos.
- Lidl: Muchos establecimientos operarán en horario reducido, generalmente de 10:00 a 15:00 horas, pero conviene confirmar según la ubicación.
- Alcampo: La mayoría de sus centros cerrarán, salvo excepciones puntuales.
- Día: La mayoría de sus tiendas abrirán con horario acortado, normalmente de 10:00 a 14:30 horas, aunque algunos locales no lo harán.
La recomendación es clara: consultar con antelación los horarios específicos de cada cadena para evitar viajes innecesarios.
Un puente con imprevistos
Mientras algunos buscan refugio en centros comerciales o en casa, otros se enfrentan a condiciones meteorológicas adversas. La borrasca fría pronosticada por Wingen podría descargar lluvias y descensos térmicos en varias regiones, alterando planes de playa o montaña. Y para quienes contaban con PortAventura, la suspensión de ventas de entradas añade otro obstáculo.
En definitiva, un puente de mayo que combina tradición, descanso y algún que otro desafío. La clave: planificar con antelación y estar preparados para los cambios de última hora.
