Un grupo de profesionales de la Gerencia de Atención Integrada de Manzanares está llevando a cabo una investigación pionera destinada a evaluar la prevalencia de los factores relacionados con la Sensibilidad Química Múltiple (SQM) en España. Esta enfermedad crónica, frecuentemente infradiagnosticada, afecta a personas que sufren reacciones adversas a niveles mínimos de productos químicos presentes en su entorno diario.
El equipo, conocido como InveGAIm, está conformado por destacados profesionales médicos, entre ellos Carmen Granda, así como las enfermeras Yolanda Prieto, Laura Cervantes y Juan Antonio Pavón. La investigación cuenta con el respaldo de Idiscam y se realiza en colaboración con el Instituto de Investigación en Combustión y Contaminación Atmosférica (ICCA) de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM). También se involucran asociaciones de pacientes como SFC-SQM Castilla-La Mancha y la Confederación Nacional (Confesq).
Los síntomas de la SQM son variados e incluyen dolores de cabeza, fatiga extrema, problemas respiratorios, náuseas, irritación ocular y alteraciones cognitivas, que se desencadenan por la exposición a productos químicos de uso común como perfumes, detergentes y pesticidas. Pese a la gravedad de estos síntomas y su notable impacto en la calidad de vida de quienes la padecen, la SQM sigue siendo una condición poco reconocida. Carmen Granda ha subrayado que la falta de conocimiento sobre la etiología de la enfermedad dificulta su diagnóstico y tratamiento, lo que ha llevado a que la estrategia preventiva se centre en evitar la exposición a posibles factores desencadenantes.
El estudio incluye la primera ‘Encuesta Nacional sobre Sensibilidad Química Múltiple’, diseñada para investigar cómo los factores asociados afectan a la población. La participación de las asociaciones de pacientes ha sido fundamental en esta fase, como ha destacado Granda, quien ha agradecido la colaboración activa de SFC-SQM Castilla-La Mancha y Confesq para fomentar la participación en este estudio.
Laura Cervantes, investigadora principal de InveGAIm, ha enfatizado la importancia de que todas las personas diagnosticadas con SQM completen la encuesta, ya que los datos recopilados serán cruciales para visibilizar el impacto real de la condición y mejorar las respuestas de los sistemas sanitario, social e institucional. La encuesta se lleva a cabo de manera anónima, voluntaria y segura.
Yolanda Prieto ha añadido que la información obtenida será clave para aumentar la visibilidad de la enfermedad, comprender su origen y evolución, y promover medidas de prevención y atención médica adecuadas. Juan Antonio Pavón ha concluido que el objetivo es dar voz a los pacientes y generar una mayor concienciación tanto en la sociedad como en el ámbito médico.
La investigación está alineada con el enfoque ‘One Health’ o ‘Una Salud’, promovido por la Organización Mundial de la Salud, que destaca la interconexión entre la salud humana, animal y ambiental. Granda ha destacado la necesidad de sensibilizar a la sociedad sobre cómo la exposición a factores ambientales puede afectar la salud de todos. Este estudio beneficiará no solo a los pacientes con SQM, sino que también tendrá repercusiones más amplias para la sociedad en general.
Por último, Granda ha señalado que los problemas de salud asociados con sustancias químicas en el medio ambiente no se limitan a la SQM; existen evidencias que relacionan «químicos eternos» en el entorno con diversas enfermedades, así como micro y nanoplásticos que se han encontrado en fases muy tempranas del desarrollo humano. Así, la investigación no solo busca arrojar luz sobre la SQM, sino también fomentar la reducción de la exposición a sustancias nocivas y concienciar a la población sobre la importancia de evitar riesgos ambientales.
vía: Diario de Castilla-La Mancha