La Guardia Civil ha llevado a cabo una operación que ha afectado a un total de 29 conductores residentes en Guadalajara, quienes enfrentan cargos por delitos contra la seguridad vial por conducir sin el permiso correspondiente. Estos permisos habían sido revocados por sentencias judiciales, y la investigación se inscribe dentro de la iniciativa ‘Astrálago’, realizada en colaboración con la Policía Local de Guadalajara.
La serie de investigaciones se inició tras la detección de un incremento de personas en la ciudad que utilizaban sus vehículos a pesar de tener el permiso de conducción suspendido temporalmente. Esta situación se debe a suspensiones impuestas por los Juzgados de lo Penal de la localidad, lo que llevó a las autoridades a establecer operativos destinados a verificar la situación de los conductores.
La operación se desarrolló en varias fases a lo largo de cuatro meses. Inicialmente, se llevó a cabo un análisis detallado que reveló la existencia de aproximadamente 85 personas en la capital alcarreña con el permiso de conducción retirado. Posteriormente, se identificó a 29 individuos que continuaron conduciendo sin estar legalmente autorizados.
Las consecuencias legales para quienes infringen esta normativa pueden ser graves. Las penas para estos delitos pueden oscilar entre 3 y 6 meses de prisión, con la posibilidad de imponer también una multa de 12 a 24 meses, así como trabajos en beneficio de la comunidad que pueden variar entre 31 y 90 días. La actuación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Local en esta operación resalta el compromiso de las autoridades por mantener la seguridad vial y tomar medidas contra las conductas irresponsables de aquellos que eligen ignorar la normativa vigente.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
