La Audiencia Provincial de Toledo llevará a cabo el juicio este martes, 30 de septiembre, en el que se juzgará a M.R.V. por un delito contra la intimidad relacionado con la revelación de datos clínicos de otra persona. La acusada, que laboraba en el antiguo hospital Virgen de la Salud, ahora cerrado, se enfrenta a una pena de dos años y medio de prisión solicitada por la Fiscalía, que también propone una inhabilitación absoluta de ocho años.
Los incidentes ocurrieron el 30 de enero de 2017, cuando M.R.V., en su calidad de funcionaria pública del hospital, accedió a la historia clínica de M.G.J. sin contar con justificación ni el consentimiento de la afectada. Posteriormente, la acusada compartió esta información confidencial con una tercera persona.
M.G.J. había recibido atención médica en el Centro de Salud del Polígono de Toledo el 28 de enero de 2017. Según la acusación, M.R.V. utilizó su usuario para acceder a la historia clínica, a pesar de que M.G.J. no había proporcionado autorización para que sus datos médicos fueran consultados.
El Ministerio Fiscal califica los actos de M.R.V. como constitutivos de un delito contra la intimidad, por lo que solicita una pena de dos años, seis meses y un día de prisión, además de una multa de veinte meses a razón de 12 euros diarios. Se ha indicado que, en caso de impago, se impondría un día de privación de libertad por cada dos cuotas no saldadas. Asimismo, el fiscal demanda la inhabilitación absoluta de la acusada durante un periodo de ocho años.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
