En un sorprendente giro de eventos, Kamala Harris se convierte en la candidata del Partido Demócrata a la presidencia en apenas 36 horas. La vicepresidenta logró el respaldo verbal de más de 2.200 delegados, superando el 55% requerido de los 3.949 delegados. Se espera que la votación se realice la próxima semana de manera telemática.
Según una encuesta de Morning Consult, la ventaja de Donald Trump sobre Harris se ha reducido a solo dos puntos. El apoyo demócrata a Harris ha sido rápido y notable, recordando el apoyo masivo que recibió Joe Biden en marzo de 2020. La unidad del partido en torno a Harris parece ser una estrategia calculada para enfrentar a Trump.
La rápida convergencia en torno a Harris también se ha visto impulsada por una afluencia de donaciones. Incluso Nancy Pelosi, ex presidenta de la Cámara de Representantes, ha respaldado a Harris a pesar de tener una relación tensa con ella. La unidad y el sentido práctico han sido fundamentales en esta decisión, similar a lo ocurrido en 2020 para enfrentar a Trump.
Harris, de 59 años, debe enfocarse en movilizar el voto joven y de las minorías para vencer a Trump. La unidad del Partido Demócrata es crucial para asegurar la participación de votantes que de otra manera podrían abstenerse. Joe Biden, recuperándose del Covid-19, participó en la ceremonia de unidad desde su casa, declarando: “El nombre en lo alto del ticket ha cambiado, pero la misión es la misma”.