San Pablo de los Montes (Toledo) ha sido escenario de la presentación de un informe que ha levantado un interés significativo en la región. El Gobierno de Castilla-La Mancha ha valorado de manera “muy positiva” los resultados del «Estudio de impacto económico, social y ambiental de la Actividad Cinegética», llevado a cabo por la Fundación Artemisan. Este estudio, revelado en un evento que contó con la presencia del presidente regional, Emiliano García-Page, muestra un notable crecimiento en la actividad cinegética y su función como motor económico para la Comunidad Autónoma.
La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, ha informado que la actividad cinegética ha alcanzado niveles históricos en la región. Se ha observado un incremento del 59,4% en el dinero movilizado, que ha pasado de 604,3 millones de euros a 963,3 millones, así como un aumento del 53% en el empleo generado, que ahora llega a 21,800 puestos de trabajo. Este sector representa un 2,1% del PIB regional, una mejora respecto al 1,7% reportado en 2016.
Gómez ha destacado que estos datos consolidan la caza como una actividad vital para el desarrollo del medio rural, contribuyendo a la generación de riqueza y a la fijación de la población en los pueblos. En este sentido, también se ha enfatizado la colaboración entre el Gobierno regional y los representantes del sector cinegético, resaltando el cumplimiento del Pacto por la Caza firmado en mayo de 2023.
Además, se han alcanzado logros significativos, como el primer convenio que permite a las asociaciones formadas y supervisadas por la administración capacitar a nuevos cazadores y especialistas. Desde 2022, Castilla-La Mancha ha liderado la entrega de licencias de caza y pesca gratuitas a los residentes.
En un esfuerzo por la innovación, Castilla-La Mancha se ha unido a otras comunidades autónomas para establecer una licencia interautonómica de caza, facilitando su uso en todo el país. Asimismo, la materia de conservación se ha abordado con la certificación de la carne de caza desde 2023, que fomenta la gestión sostenible y el desarrollo rural.
Este año, la nueva Orden de Vedas incluye la autorización para cazar la tórtola europea, reflejando la colaboración entre cazadores y técnicos para la recuperación de especies. Además, la oferta de caza social ha aumentado, pasando de tres a nueve cotos, haciéndola más accesible para la comunidad.
Gómez ha reafirmado el compromiso del Gobierno con una gestión cinegética sostenible, que no sólo apoya la conservación de los ecosistemas, sino que también impulsa el turismo rural y fortalece el tejido empresarial asociado a la carne de caza. La consejera ha expresado su agradecimiento a todos los involucrados en la realización del estudio, confiando en que sus conclusiones fortalezcan el diálogo y la planificación de esta actividad vital para Castilla-La Mancha.
vía: Diario de Castilla-La Mancha