En Albacete, la carretera provincial AB-300 ha sido cerrada al tráfico desde la tarde del 13 de octubre debido a las graves inundaciones provocadas por intensas lluvias en Chinchilla de Montearagón, que alcanzaron acumulaciones de entre 45 y 50 litros por metro cuadrado en un corto periodo de tiempo.
Fran Valera, vicepresidente de la Diputación de Albacete y responsable del área de Obras, visitó la zona afectada junto a un grupo de técnicos para evaluar los daños y planificar la reapertura de la carretera. Valera destacó que las tareas de limpieza dependerán de la disminución del nivel del agua, anticipando que la circulación podría restablecerse en la tarde del mismo día o, a más tardar, en la mañana siguiente.
La recurrente problemática de inundaciones en el Hondo de la Morena, donde se encuentra el punto más bajo de la AB-300, representa un reto constante para la infraestructura. A pesar de las dificultades que suponen estos cortes de carretera, Valera aseguró que el acceso al Parador Nacional de Albacete se mantiene seguro y operativo a través de la carretera de Murcia, como confirmó su director, Javier Álvarez.
Además de las medidas inmediatas, la Diputación de Albacete está en contacto con autoridades superiores para buscar soluciones a largo plazo, incluyendo la posibilidad de elevar la carretera. Sin embargo, estos planes requerirían la realización de importantes obras hidráulicas para abordar los problemas de inundación recurrentes que afectan a la zona, lo que también implicaría infraestructuras vecinas, como la autovía y la línea ferroviaria.
La Diputación mantiene una vigilancia continua sobre la situación y está realizando un seguimiento activo del nivel del agua para asegurar una reapertura pronta y segura de la AB-300. Para más información, se recomienda visitar el sitio web oficial de la Diputación de Albacete.
vía: Diario de Castilla-La Mancha