La portavoz del Gobierno de la Diputación de Ciudad Real, Rocío Zarco, asistió el pasado sábado a la Misa Pontifical de Coronación Canónica de María Santísima de la Palma, Reina de los Mártires, en Valdepeñas. Este emotivo evento conmemoró tres siglos de devoción hacia esta imagen, considerada titular de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia, fundada en 1715.
La ceremonia, que tuvo lugar en la Iglesia Parroquial del Santísimo Cristo de la Misericordia, fue presidida por el obispo de la Diócesis de Ciudad Real, Abilio Martínez. Entre los asistentes se encontraban el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, así como diversas autoridades locales y regionales, junto a representantes del ámbito cofrade.
Con un aporte económico de 2.000 euros, la Diputación de Ciudad Real apoyó los actos conmemorativos y la posterior procesión extraordinaria que siguió a la coronación, la cual estuvo animada por la música de la Sociedad Filarmónica “El Carmen” de Salteras. Rocío Zarco destacó el compromiso de la Diputación con las manifestaciones culturales y religiosas que forman parte de la identidad colectiva de la provincia, y felicitó a la Hermandad por su dedicación en mantener viva una tradición de 300 años, considerada un valioso legado espiritual y cultural.
La misa, que atrajo a numerosos fieles, dio paso a una solemne procesión por las calles de Valdepeñas, en la que se respiraba un ambiente de devoción y emoción. Cofradías invitadas de la provincia también se unieron a esta significativa celebración.
Con esta iniciativa, la Diputación de Ciudad Real reafirma su compromiso con la preservación de las tradiciones religiosas y el fortalecimiento del sentimiento de pertenencia en los municipios de la provincia.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
