Efectivos de la Guardia Civil de Albacete han desarticulado una operación que ha llevado a la investigación de dos hombres, de 37 y 42 años, residentes en Murcia e Íscar, respectivamente, por su presunta implicación en un delito contra la propiedad industrial. Ambos son acusados de violar el derecho de marca tras la incautación de 7.157 prendas de vestir falsificadas, que incluyen camisetas deportivas y chándales.
La operación se inscribe en el marco de los esfuerzos que la Guardia Civil de Albacete ha establecido en la provincia para detectar y confiscar mercancía falsificada. Según un comunicado de la Benemérita, los hechos ocurrieron en la autovía A-30, dentro del término municipal de Albacete, donde se había activado un dispositivo operativo para asegurar la seguridad ciudadana.
Durante este control, los agentes prestaron atención a un camión que mostraba un comportamiento sospechoso. Al identificar a los ocupantes del vehículo, se realizó una inspección en la zona de carga, donde se encontraron 77 bolsas que contenían prendas de varias marcas comerciales. La forma de transporte y la presentación de estos artículos suscitaron las sospechas de los investigadores, que decidieron intervenir.
Al solicitar a los ocupantes del camión la documentación necesaria que acreditara la adquisición legítima de las prendas, estos no pudieron proporcionar albaranes ni facturas. Ante la ausencia de pruebas de procedencia legal, las prendas fueron intervenidas y puestas a disposición judicial.
Los especialistas fiscales de la Guardia Civil llevaron a cabo un recuento de los artículos incautados, confirmando que se trataba de 7.157 prendas que imitaban modelos originales, pero que carecían de los elementos auténticos que las validaran como productos genuinos. Las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Instrucción Número dos de Albacete, que en estos momentos está en funciones de guardia.
Esta operación destaca la lucha de las autoridades contra la falsificación, un delito que no solo afecta la propiedad industrial, sino que también tiene un impacto considerable en la economía y en la seguridad de los consumidores.
vía: Diario de Castilla-La Mancha