Las selecciones sub-14 y sub-16 femeninas de Castilla-La Mancha han cerrado su participación en la primera fase del campeonato nacional, enfrentándose a rivales de gran nivel que pusieron a prueba las habilidades y el talento de las jugadoras de la región. En esta etapa inicial, la selección sub-14 no logró conseguir victorias en sus partidos contra Madrid y Galicia, enfrentamientos que pusieron de manifiesto la calidad y la estrategia del fútbol femenino en esas comunidades. Por su parte, la selección sub-16, aunque mostró un gran empeño en el terreno de juego, solo pudo sumar un punto tras empatar con Galicia, tras una dura derrota frente a Madrid.
Este torneo no solo ha sido un campo de competencia, sino también una valiosa oportunidad de aprendizaje para las jóvenes futbolistas de Castilla-La Mancha. La experiencia de competir al más alto nivel permite a las jugadoras evaluar sus habilidades y reconocer las áreas en las que necesitan mejorar. Además, el enfrentamiento con equipos de otras comunidades fomenta el compañerismo y el sentido de unidad entre las jugadoras, elementos esenciales para su desarrollo tanto deportivo como personal.
A pesar de los resultados en esta primera fase del nacional, el futuro del fútbol femenino en Castilla-La Mancha se vislumbra esperanzador. Entrenadores y personal técnico mantienen un enfoque positivo y están comprometidos a seguir impulsando el crecimiento del deporte en la región. La experiencia adquirida en estos torneos se considera invaluable y se espera que contribuya de manera significativa al desarrollo y éxito de las jugadoras en el futuro. La pasión y dedicación mostradas por estas jóvenes futbolistas son indicativas de un brillante porvenir para el fútbol femenino en Castilla-La Mancha.