La consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, realizó una visita este lunes al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, en Ciudad Real, para comprobar la histórica inundación que ha experimentado el espacio en los últimos meses. Actualmente, el parque cuenta con 1.130 hectáreas inundadas, lo que representa aproximadamente el 66 por ciento de su superficie, gracias a las recientes lluvias y la activación de pozos de emergencia.
Durante su recorrido por la isla del Pan, Gómez resaltó la «explosión de vida y biodiversidad» que se está observando en el parque, especialmente en especies amenazadas que se manifiestan de manera positiva. Recordó que la última gran inundación se había registrado en 2018, mientras que el año pasado la superficie inundada apenas superó las 600 hectáreas, lo que pone de relieve la notable mejora actual.
La consejera enfatizó que la situación del parque había sido crítica durante años, con episodios de escasísima inundación y autocombustión de turbas. Gracias a decisiones tomadas en los últimos dos años, como la activación de pozos de emergencia y las lluvias de primavera, se ha logrado recuperar el hábitat natural del parque. Junto a la directora general de Biodiversidad y Medio Natural, Susana Jara, y otros responsables del sector, Gómez destacó la necesidad de implementar medidas de adaptación al cambio climático para asegurar la sostenibilidad de la zona a largo plazo.
En este contexto, se ha puesto en marcha un marco de acción para las Tablas de Daimiel, impulsado por el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Estado, que busca soluciones para mejorar el estado ambiental y promover el desarrollo sostenible de la actividad agraria y social en la región. Se han formado grupos de trabajo centrados en agua, restauración medioambiental y desarrollo socioeconómico.
Gómez subrayó que las medidas medioambientales urgentes son esenciales para la conservación del humedal, la restauración del ecosistema, la optimización del consumo hídrico y el mantenimiento de la actividad agrícola y ganadera, además de la promoción de actividades industriales y de servicios.
La consejera también se refirió a la próxima reunión del Consejo de la Red de Parques Nacionales, convocada para el 27 de mayo, que abordará la situación hidrológica de los parques, incluidas las Tablas de Daimiel. La mejora en la inundación ha provocado una notable respuesta biológica, especialmente en la avifauna, donde se destacan especies amenazadas como el porrón pardo y la malvasía, así como la presencia de parejas de cerceta pardilla con recientes crías.
En cuanto a la vegetación, el parque cuenta con praderas de plantas subacuáticas esenciales para su ecosistema. Gómez anunció que en las próximas semanas se dará a conocer un plan regional de recuperación de especies acuáticas.
Asimismo, se están realizando acciones para mejorar el hábitat, lo que incluye la restauración del itinerario de la isla del Pan, y el desarrollo de un nuevo centro de visitantes que se espera inaugurar en el último trimestre de 2026, con una inversión de aproximadamente 1,3 millones de euros. También se ha anunciado la preparación para licitar un estudio sobre la escorrentía de aguas pluviales en Villarrubia de los Ojos, con el objetivo de evitar la contaminación del parque. Este proyecto, que busca mejorar la infiltración, cuenta con un presupuesto de 120.000 euros.
Además, Gómez mencionó que se está a la espera de la aprobación de un presupuesto para ayudas destinadas a áreas de influencia socioeconómica de parques nacionales, lo que proporcionará una inversión significativa para mejorar infraestructuras y crear empleo en la zona.
vía: Diario de Castilla-La Mancha