La Real Sociedad enfrenta un inicio complicado en esta temporada de LaLiga, generando preocupación entre sus aficionados tras no conseguir ninguna victoria en sus tres primeros encuentros, que se traducen en dos empates y una derrota. La atención recae sobre dos jugadores clave: el internacional japonés Take Kubo y el canterano estelar Ander Barrenetxea, quienes tienen una gran responsabilidad en el desarrollo del juego del equipo, aunque hasta el momento no han logrado cumplir con las expectativas.
La situación de Kubo es especialmente crítica, ya que su integración en el sistema de juego debe ser más consistente para ayudar al equipo en momentos decisivos. Barrenetxea, por su parte, necesita demostrar una mayor regularidad en su rendimiento. La presión es alta sobre ambos, pero existe la confianza de que puedan elevar su nivel en los próximos partidos.
Mirando hacia el futuro, el entorno de la Real Sociedad espera un cambio en el rendimiento de sus talentos. A pesar de los distintos esquemas tácticos que ha implementado el entrenador Sergio Francisco, la presencia continua de Kubo y Barrenetxea en el once titular es esencial. El éxito del equipo podría depender de su adaptabilidad y capacidad para resplandecer en el campo. Con la confianza de Jokin Aperribay y el cuerpo técnico, se espera que si ambos jugadores logran dar un paso adelante, puedan contribuir de manera significativa en la recuperación de la confianza y en la competición en Europa.