La relación de amistad entre María Pombo y Laura Matamoros ha sido un pilar en sus respectivas carreras como influencers, caracterizada por el apoyo constante que ambas se brindan en cada nuevo proyecto. Sin embargo, recientes declaraciones de Pombo han generado un sinfín de especulaciones sobre la naturaleza de su vínculo, despiertando rumores de posibles conflictos.
En una reciente aparición en el podcast de Susana Molina, «La Sobremesa», María Pombo expresó su deseo de participar en una edición de Gran Hermano que reuniera únicamente a creadores de contenido, lo que llevó a una reflexión sobre cómo la exposición mediática puede transformar la percepción de las personas. Pombo mencionó a su amiga Laura Matamoros, observando que a menudo la difería notablemente cuando la veía en televisión en comparación con su comportamiento en la vida real. Según Pombo, «no tiene nada que ver Laura Matamoros sin cámaras que como con cámaras», sugiriendo que la presión del espectáculo altera su personalidad.
La charla, que tenía como fin abrir un debate sobre la influencia de los medios en el comportamiento humano, no tardó en ser cuestionada y malinterpretada por algunos medios y seguidores. Ante el revuelo generado, muchos fans comenzaron a especular sobre una posible enemistad entre las dos influencers, lo que llevó a las redes sociales a convertirse en un caldo de cultivo para rumores sobre su amistad.
Afortunadamente, María Pombo no dejó que la situación se agrandara y aclaró que su intención no era criticar a Laura, sino reflexionar sobre un fenómeno que ella también había observado en otros. Por su parte, Laura Matamoros hizo eco de las preocupaciones de sus seguidores mediante una publicación en sus redes sociales, donde instó: «No busquéis donde no hay», con el fin de poner fin a las especulaciones y reafirmar la solidez de su amistad.
A pesar de los malentendidos que puedan surgir, la amistad entre Pombo y Matamoros parece mantenerse firme, reflejando que, como en cualquier relación humana, es normal enfrentar momentos de confusión y, a la vez, contar con el apoyo incondicional de quienes nos rodean.