Toledo ha logrado un avance significativo hacia la estabilidad laboral en el sector sanitario tras la reunión de la Mesa Sectorial de las Instituciones Sanitarias del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, celebrada hoy. En esta reunión, se aprobó la Oferta Pública de Empleo (OPE) para 2025, que contempla un total de 1.591 plazas, de las cuales 1.429 son de acceso libre y 162 están destinadas a promoción interna.
Esta decisión, ratificada sin oposición, subraya el compromiso del Gobierno regional con la estabilidad laboral de los profesionales del sistema sanitario público. Según el director gerente del SESCAM, Alberto Jara, la OPE es parte de un esfuerzo sostenido en la última década, periodo en el que se han convocado más de 15.000 plazas. Jara destacó que esta iniciativa tiene como objetivo reducir la temporalidad y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de la salud.
La oferta incluye 433 plazas para personal facultativo, destacándose posiciones de médico de familia, pediatras y médicos de emergencias. Además, se han convocado 321 plazas para personal diplomado, siendo la mayoría para enfermería, y 279 plazas para personal sanitario técnico, donde se resalta la inclusión de puestos para técnicos en cuidados auxiliares de enfermería.
En un hito importante, por primera vez se han incluido plazas para enfermeras especialistas en Enfermería Familiar y Comunitaria, marcando un paso adelante en la especialización del personal sanitario. También se han creado 558 nuevas plazas dentro del personal de gestión y servicios, enfocándose en roles como auxiliares administrativos, celadores y técnicos en tecnologías de la información.
Adicionalmente, la Mesa Sectorial aprobó modificaciones en la Orden de Plantillas del SESCAM. Como parte de estos cambios, el puesto de Coordinador de Calidad, Investigación, Docencia y Formación se dividirá en cuatro roles distintos, lo que permitirá una atención más especializada en cada área. Asimismo, se han establecido nuevas categorías de personal estatutario en el ámbito de la Prevención de Riesgos Laborales, respondiendo a la creciente demanda de perfile específicos que cumplan con las normativas legales.
Este movimiento no solo refuerza la plantilla sanitaria, sino que también tiene como objetivo elevar la calidad del servicio ofrecido a la ciudadanía, garantizando una atención más eficiente y especializada dentro del sistema público de salud de Castilla-La Mancha.
